Las 7 etapas de la demolición de tu inmueble
Demoliciones industriales y de inmuebles
Demoliciones Borraz S.L.
Sin preocupaciones
Antes, durante y después
Nos encargamos de todas las tareas que hay que realizar antes, durante y después del derribo de tu propiedad para que no tengas que preocuparte de nada
Cuando contratas un trabajo de demolición, por muy complejo que sea, es tu inmueble el que debe quedar hecho polvo.
Por eso en Demoliciones Borraz siempre nos ocupamos de todo el proceso, de principio a fin, para que tú no tengas que preocuparte de nada.
Empresa seria, les confíé una demolición delicada y como cirujanos la llevaron a cabo sin ningún desperfecto, gracias por todo. Volveré a confiar en ese equipo. ¡¡¡Gracias Fernando!!! – Andres Gonzalez Estevez
Quédate tranquilo de principio a fin
Estas son las 7 etapas en las que dividimos las demoliciones industriales y de inmuebles:
En la primera etapa realizamos una investigación sobre tu inmueble y sobre el entorno donde se encuentra ubicado.
Durante esta investigación:
- Estudiamos con detenimiento los planos y la estructura de tu inmueble.
- Analizamos los materiales con los que fue construido.
- Buscamos residuos peligrosos en el interior y, en caso de que existan, los cuantificamos y los clasificamos según sus características, para luego tomar las medidas necesarias para su descontaminación.
- Estimamos la cantidad de escombros que se generarán tras la demolición.
- Comprobamos la relación que hay entre tu inmueble y las edificaciones colindantes.
Toda la información que reunimos aquí la utilizamos luego para decidir el método y las técnicas de demolición que emplearemos para derribar tu inmueble. (En la 5ta etapa te hablamos más sobre esto).
En la segunda etapa elaboramos el proyecto de demolición. Un documento que recoge los datos necesarios para poder demoler tu inmueble de manera segura, sin afectar a las personas ni al entorno.
Este documento incluye los siguientes contenidos:
- Los antecedentes. Te explicamos cuál es la situación previa de tu inmueble, por qué debes demolerlo, qué tipo de demolición necesitas y a quién más puede afectar esa demolición.
- Una memoria descriptiva. Describimos el método, las técnicas y los medios que utilizaremos para demoler tu inmueble. Y también mencionamos si realizaremos la evacuación de los residuos dentro de la propia obra o no.
- Una memoria ambiental. Hablamos del impacto que puede causar la demolición de tu inmueble sobre el medio físico que lo rodea.
- Un estudio de seguridad y salud. Presentamos las medidas que tomaremos para garantizar la seguridad, la salud y la protección de nuestros trabajadores.
- Un estudio de gestión de residuos. Realizamos una estimación de la cantidad de residuos que deben producirse en tu obra, y explicaremos cómo vamos a manejarlos, almacenarlos, clasificarlos y evacuarlos.
- Una memoria fotográfica. Adjuntamos las fotografías que realizamos ‘’in situ’’ en el lugar donde se encuentra tu inmueble. Estas fotografías nos permiten hacernos una idea muy clara sobre tu inmueble y sus condiciones.
- Los planos. Recopilamos una información gráfica que nos será imprescindible para ejecutar la demolición de tu inmueble.
- El pliego de condiciones. Establecemos las prescripciones técnicas, generales y particulares, de nuestro proyecto de demolición.
- El presupuesto. Recogemos todo el presupuesto que será necesario para llevar a cabo la demolición de tu inmueble, incluyendo nuestros honorarios. Nuestros clientes anteriores afirman que existe una relación muy buena entre la calidad, la seguridad y la rapidez de nuestras demoliciones y sus precios.
En la tercera etapa realizamos una serie de trámites administrativos que son obligatorios.
Nosotros nos encargamos de la mayoría de ellos (el plan de gestión de residuos, el plan de seguridad y salud, el plan de desamiantado y las aperturas de centro de trabajo).
Y hay otros 2 de los que también podemos ocuparnos, o que puedes gestionar tú con nuestra orientación:
- La licencia de demolición. Es el permiso que otorgan las autoridades competentes de tu localidad para demoler tu inmueble. No es complicado obtenerla aunque sí puede tardar un poco, porque cada ayuntamiento tiene sus propias reglas y exige una documentación determinada.
- Las tasas por licencia de obra. Son las tasas que debes pagar el promotor ante las autoridades competentes de tu localidad para obtener la licencia.
En la cuarta etapa, que es la que antecede a la demolición, realizamos una serie de trabajos previos que nos permiten dejar listo a tu inmueble para su derribo.
Estos trabajos son específicos en cada una de nuestras obras pero siempre incluimos, por lo general, las siguientes actividades:
- Retiramos las instalaciones de tu inmueble (electricidad, teléfono, gas, agua, etc.) y vaciamos las tuberías y los depósitos de combustible.
- Evacuamos todos los enseres que tengas en el interior (muebles, equipos, objetos, etc.)
- Extraemos aquellos elementos constructivos internos que pueden ser desmontados sin peligro (marcos, puertas, ventanas, pilares, vigas, escaleras, etc.) y guardamos los que son recuperables, para que luego puedas volver a utilizarlos.
- Saneamos el inmueble (si está contaminado o contiene productos tóxicos):
-
- Lo desinfectamos para eliminar parásitos, roedores e insectos.
- Retiramos los productos tóxicos y los elementos contaminados.
- Aplicamos un tratamiento especial a las zonas contaminadas.
- Colocamos las instalaciones de la obra ( vallados, señalización, vestuarios, aseos, primeros auxilios, etc).
Durante la quinta etapa es cuando demolemos tu inmueble. Y, para hacerlo, seleccionamos primero el método más conveniente para tu caso.
Para elegir este método, tenemos en cuenta 4 factores claves:
- Las condiciones del lugar de trabajo (entorno, espacio disponible)
- Los materiales a demoler (tipo, dureza, estado).
- La gestión de los residuos
- La relación de tu inmueble con otras estructuras cercanas (influencia de vibraciones, posibilidad de uso de maquinaria especial, etc.)
Los métodos más habituales que utilizamos en las demoliciones industriales y de inmuebles son los siguientes:
- La demolición mecánica. Se basa en el empleo mayoritario de máquinas (robots, excavadoras, retroexcavadoras, etc.) y puede realizarse mediante distintas técnicas (por empuje, tracción, impacto o fragmentación). Es el tipo de demolición que más utilizamos, porque nos permite lograr una mayor rapidez y productividad.
- La demolición manual. Se basa en el empleo mayoritario de medios manuales manejados por el hombre (maza, pico, pala, pistolete, motosierra, cortadora, etc.) y se realiza elemento a elemento. La utilizamos solo cuando nos hace falta alcanzar un nivel especial de precisión (por ejemplo: cuando necesitamos conservar elementos constructivos cercanos o anexos), porque es segura, versátil y afecta muy poco a los lugares colindantes a la obra. Generalmente la empleamos también de manera complementaria a la demolición mecánica.
En la sexta etapa nos encargamos de gestionar todos los residuos que se han generado durante la demolición de tu inmueble.
Durante esta etapa retiramos, separamos y almacenamos los distintos tipos de residuos de acuerdo a sus características.
- Si tenemos que retirar residuos peligrosos (como los materiales que contienen amianto, por ejemplo) los tratamos con un cuidado especial. En tales casos, descontaminamos esos residuos primero, y luego los etiquetamos y los colocamos en un depósito especial.
- Después les entregamos todos los residuos a los transportistas autorizados para llevarlos hasta las instalaciones de los gestores finales.
- Una vez allí, los residuos son almacenados de forma definitiva, reciclados o desechados en el vertedero, según los gestores estimen conveniente en cada caso.
En la séptima etapa realizamos una serie de trabajos de acondicionamiento de la zona antes de dar por concluida la obra.
Estos trabajos finales dependen de las características de tu edificación y de las del entorno, así como de de las normativas que existan en tu localidad y de las necesidades específicas que tú tengas.
Pero, de manera general, llevamos a cabo las siguientes tareas:
- Revisamos las edificaciones colindantes para evaluar su estado y ver las posibles lesiones que estas hayan podido sufrir.
- Conservamos todos los apeos y apuntalamientos que realizamos para sujetar las edificaciones colindantes, así como las vallas y los cerramientos, hasta que decidas edificar de nuevo.
- Mantenemos los desagües que son necesarios para impedir que la acumulación del agua de lluvia o de nieve perjudique a los edificios colindantes.
- Hacemos todas las reparaciones necesarias en caso de que exista algún daño en los elementos colocados.
- Limpiamos y vaciamos el solar resultante, para que quede en buenas condiciones, y luego colocamos vallas a su alrededor, para dejarlo bien protegido.
- Y si tuvimos que ocupar la vía pública durante la realización de tu obra, limpiamos todas las aceras aledañas para que queden en perfecto estado.
Cada trabajo es único
Derriba tu inmueble sin preocupaciones